fragmento frágil
No se culpe a nadie de mi suerte.
He visto el rostro de la belleza y no fue feliz.
En el fulgor del instante en que se cruzaron nuestros ojos, me dedicó una mirada instantánea como un balazo.
Casi tan fatal.
El sol es un agujero astillado vacío de fuego.
Hay: una gravedad invertida que me empuja hacia no ser.
Hay: tanta claridad alrededor que hace desaparecer las formas transformando todo en una gran nada blanca.
1 comentario
estrella -
Seguiré pasando, aunque nada diga.
Saludos!