narciso revisitado
El círculo vicioso de Narciso
ha cambiado de signo en estos días
sigue siendo su imagen lo único que mira
y lo que lo tiene ahora fascinado es el odio
que esa imagen le provoca, como si
fuera un hombre santo y encarnara en sí mismo
todas las miserias de la época y la especie
como si fuera el último héroe con valor
para cortar los males del mundo de raíz
y asume su condena solipsista con la entrega
de un destino irrevocable, ejercitando
con desprecio el deporte de escupir en el espejo.
2 comentarios
Carlos -
Ariel -
Si el perro flacucho se quedó sin amo, yo se lo adopto...
Y por supuesto, agradecido de que nos enlace. Será correspondido ipso facto.
Abrazos, Ariel