arms
Fue en la noche de año nuevo
que a mis brazos le crecieron otros brazos
no fue algo doloroso ni complejo
simplemente sucedió
tres pares de bracitos pequeños e inexpertos
en cada brazo
recuerdo que pensé: a falta de alas…
y los bracitos intentaban atrapar
a las luciérnagas del jardín
se colgaban de los arbustos que tenían a mano
y se enredaban aplaudiendo los estallidos
de los fuegos en el cielo
fue una pena que esa noche estuviera solo
era la situación ideal para dar un buen abrazo
brindé varias veces a 14 manos
tuve los mejores deseos para el futuro
y luego me dormí
a la mañana siguiente los bracitos habían muerto
los desprendí de mis brazos como ramas secas
y los apilé en el jardín con las hojas y los escarabajos
después encendí la fogata
sintiendo una nostalgia desconocida
y pensando en la inevitable finitud
de toda floración.
ilustración: Luigi Serafini
1 comentario
Natalia -
En la bisagra del 31 y el 1 de año. Qué buenos brindis! y qué macana tantos brazos sin abrazo.
Gracias por pasar por Ambrosía y por linkearme, CArlos.
Un abrazo para esos brazos que se salvaron.